Toreros muertos, Los - Por Biafra (1987)
El proyecto del inclasificable Pablo Carbonell de mezclar rock y humor tiene larga raigambre en España: La Romántica Banda Local o los numerosos intentos de Moncho Alpuente durante la transición de arrancar una sonrisa inteligente a sus oyentes así lo prueban. Tras el éxito de “Mi agüita amarilla”, mucha gente descubrió el vozarrón del humorista gaditano, que gozó de un éxito pasajero como cantante hasta reencarnarse en reportero televisivo kamikaze en el añorado “Caiga quien caiga”. Pero sería un error centrarse solo en el envoltorio humorístico (o surrealista, adjetivo que la gente utiliza cuando no sabe cómo adjetivar algo): “Mamá” tiene un excelente ritmo funky que parece salido de un disco de Talking Heads, “Para ti” es un caramelito pop adobado con toneladas de sorna, mientras que “Pilar” y “Manolito” son sendas gamberradas que habrán amenizado más de una despedida de soltero.
Edición original 1987
Sello: Ariola